Una tristeza, un comodín
Una tristeza diferente
Una tristeza de Cementerio del Este
Esa que viene después de una pérdida
Es un luto
Es el saber que ya no habrá más
Y aunque nunca fue bueno
Sigue siendo una supresión, una última parada
Es una tristeza que acompaña la evolución obligatoria
No hay persona en este mundo sin instinto de supervivencia
Estoy feliz con este guayabo porque aunque me duele hasta el aliento
Sé que finalmente se acaba esta tortura incesante
Es un final doloroso, pero es un final
Un final necesario para un comienzo
Un comienzo que Dios decoró con un adonis
Un escalador que me subió por el pecho hasta detrás de la oreja
Donde dice que se quiere mudar después de ponerse chiquitico, y vivir ahí para siempre
Un genio del romance que me hace reír dentro de la asfixia de llorar un muerto
Un millón de sonrisas en una sola noche de un 30 de mayo
Dicen que no es bueno entretener los lutos
Pero a este no lo busqué
Simplemente llegó a mi entorno y a mis espacios cubierto de estrellas
Estrellas del buen humor y las carcajadas
Estrellas de la seguridad, la sencillez y la transparencia
Estrellas de una masculinidad avasallante que protege a la damisela en peligro que hoy soy
Un alto tatuado con cara de bebé
Un bebesaurio
Un besador profesional
Unas manos de albañil
Un casco de ingeniero
Unas risitas que no paran
Creo que es un ángel
"Dios aprieta pero no ahoga"
Así que me mandó un comodín de 2 semanas
Me compongo en sus inventos
Y sus ganas de dormir abrazado
Sé que este medio no es kosher
Pero sobreviví
Y ahora me dispongo
A vivir mi mejor vida
Esa que siempre estuvo ahí esperando por míi
Esa donde hay una niña feliz